A lo largo de mi vida he visitado la ciudad de Barcelona por motivos laborales muchas veces, y me quedaba embelesada admirando las fachadas de preciosos edificios desde las ventanillas de un taxi que me llevaba con prisas a alguna reunión. Pero en esta ocasión me he tomado mi tiempo para visitar la ciudad, sin prisas y sola, con la compañía fiel de mi cámara de fotos.

El tren forma parte de mi viaje, salgo de la estación de Santa Justa en Sevilla temprano, me quedaban algunas horas para llegar a mi destino que pensaba disfrutar admirando el paisaje por la ventanilla sin otra obligación. Y así fue, antes de que me diera cuenta me encontraba en la Estación de Sants en Barcelona.

El ir y venir incansable de viajeros te dan una idea de la importancia de Barcelona como ciudad turística y de negocios. La ventaja es que desde la estación puedes dirigirte a cualquier lugar de la ciudad con la linea de metro o a cualquier lugar de los alrededores en tren de cercanías o autobús.

Mi intención esta vez era dedicar mi tiempo a conocer los edificios y lugares más representativos del modernismo en la ciudad. El Modernismo es un movimiento artístico que tuvo lugar a finales del siglo XIX y principios del XX en Europa. Aunque la expresión más conocida del Modernismo la encontramos en la arquitectura, también influyó a otros ámbitos como las artes decorativas, la literatura o la música. Conocido en el resto de Europa como Art Noveau, Modern Style, Jugendstil.

En Cataluña fue un movimiento con mucha fuerza con arquitectos como Gaudí, Domènech i Montaner y Puig i Cadafalch, que  hicieron de Barcelona la capital mundial del Modernismo.

120 lugares por descubrir

El modernismo caló tanto en la ciudad que dejó huella en impresionantes casas y palacios, en el templo símbolo de la ciudad y en un inmenso hospital. Y también dejó su impronta en obras más populares y cotidianas, como farmacias, comercios, tiendas, farolas o bancos, hasta un total de 120 obras que demuestran que el Modernismo arraigó con fuerza en Barcelona y que aún hoy es un arte vivo.

Imposible abarcar tanto modernismo en una visita, pero sí me dio tiempo a pasear por “la isla o manzana de la discordia”, donde cinco edificios: la Casa Lleó Morera de Lluís Domènech i Montaner, la Casa Mulleras de Enric Sagnier, la Casa Bonet de Marceliano Coquillat, la Casa Amatller de Josep Puig i Cadafalch y la Casa Batlló de Antoni Gaudí compitieron cuando se estaban construyendo y compiten hoy en día por ser la más bella.

Otros de los lugares que pude visitar fue el Recinto modernista de San Pau, que fue el antiguo Hospital de la Santa Creu i Sant Pau. No es de los lugares más conocidos en Barcelona y no entiendo porqué, porque es verdaderamente impresionante. Fue diseñado por Lluís Domènech i Montaner, lo forman varios de los pabellones que Lluís Domènech i Montaner diseñó para que fueran utilizados en diferentes especialidades de la medicina rodeados de un jardín y comunicados por pasillos subterráneos.

Lugares como la Casa de los Punxes, el Palacio de Gaudí, el parque Guell, o cafés como el Café de la Ópera o tiendas centenarias como Escribá son lugares que no debes perderte si quieres conocer este estilo arquitectónico tan especial. Así hasta 120 lugares modernistas.

Texto y Fotografías: Mar Villalba Vega es autora del blog de viajes Mi ruta

Busca tu promoción para viajar a Brcelona en tren aquí.