El Maresme es un territorio privilegiado entre el mar y la montaña muy cerquita de Barcelona donde puedes llegar cómodamente en tren en una hora escasa. Comprende una estrecha franja a los pies de las montañas de la cordillera litoral, la Sierras de Sant Mateu, la Sierra del Corredor y el Macizo del Montnegre (las dos últimas forman el Parque natural del Montnegre y el Corredor.)
Mataró es la capital de la comarca, que comprende: Mataró, Arenys de Mar, Canet de Mar, Calella, El Masnou, Premiá de Mar, Vilasar de Mar, Tordera o Pineda de Mar, entre otras. Su litoral es conocido turísticamente como la Costa del Maresme. En el Maresme puedes disfrutar de playas largas y arenosas y es un destino turístico ideal para disfrutar en familia.
Es difícil elegir entre las cincuenta y seis playas de arena dorada y aguas azules en su totalidad accesibles. Pero como ejemplo de que las playas del Maresme son para “toda la familia”, hay tres de ellas donde puedes acudir con la mascota de la familia; la Playa de la Picòrdia en Arenys de Mar, Playa de Poblenou en Pineda de Mar y la Playa para perros de Montgat.
Pero el Maresme no solo es un lugar para disfrutar del mar y la playa, también atesora un entorno natural magnífico que poder descubrir gracias a una amplia red de caminos y senderos que unen sus pueblos.
Opciones múltiples
Existen opciones para todos los gustos, desde paseos entre viñedos a trekkings por parques como el de Montnegre y el Corredor o rutas para descubrir lugares tan bonitos como el Castillo de Burriac o las Fuentes de Argentona. Además, la mayoría de senderos se pueden hacer tanto a pie como en bici o a caballo.
El Maresme además tiene un legado histórico con una gran riqueza cultural que puedes conocer en museos tan interesantes como el Centro Enoturístico y Arqueológico de Vallmora, donde aprender sobre el tema de la explotación vitivinícola en época romana y su cultura del vino en la visita guiada por el Parque arqueológico de la bodega romana de Vallmora, o la Casa Museo Domènech i Montaner un conjunto museístico que incorpora la Masía Rocosa, del siglo XVII, y la casa Domènech, construida entre 1918 y 1919 en estilo modernista incluso conocer la artesanía como en el taller de vitrales en Estragos donde podrás ver el taller de confección de vitrales emplomados, que es una técnica tradicional y donde te explicarán la historia del vidrio y el vitral. También podrás conocer su cultura en una gran programación de eventos culturales, festivales musicales, fiestas patronales con gigantes, castellers, sardanas, etc…
Y si te gusta hacer deportes también en tus vacaciones, en el Maresme hay una gran variedad de instalaciones para la práctica deportiva, golf, hípica, fútbol, natación, triatlón, ciclismo, vela… y después del deporte que mejor que recuperarte de tu actividad física disfrutando de sus aguas termales.
Para los “gastrolovers” o amantes del buen comer, entre los productos de la huerta y las delicias del mar en tu mesa, podrás saborear las riquísimas fresas y guisantes, entre otros productos de la huerta, pescados y mariscos maridados con vinos con denominación de origen DO Alella.
Un destino muy apetecible durante todo el año gracias a sus temperaturas suaves y hospitalidad.
Texto y Fotografías: Mar Villalba Vega es autora del blog de viajes Mi ruta
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